Por Nelson Díaz.
Una herida que no cierra.
El día antes, de Sorj Chalandon, es la historia de la catástrofe de Liévin donde 42 mineros murieron el 27 de diciembre de 1974.
La tragedia es el centro argumental de la novela El día antes, publicada por Reservoir Books. Si bien parte de un hecho real, aunque es una ficción. Parece un oxímoron pero no lo es. Porque se trata (y aquí comienza la ficción) de la historia de la venganza de un hombre que, en 1974, perdió a su hermano minero, y de los turbios meandros de la memoria, del autoengaño y el crimen. Pero el contexto es bien real: el mayor accidente minero en Francia de la posguerra, cuando el carbón era un símbolo de la prosperidad nacional.
El accidente quedó grabado en la memoria del periodista y escritor Sorj Chalandon (Túnez, 1952), que por entonces trabajaba en el diario Libération. “Lo primero que escuchamos en la radio fue que se trataba de una fatalidad. Como si el contrato de trabajo de un minero incluyese la muerte. Aquello me formó”, explicó el autor.
Chalandon metamorfosea la cólera en material narrativo: una mezcla de thriller y reportaje, de denuncia social y de homenaje a los caídos, y todo esto en un mundo de grises donde los buenos son malos y los malos, buenos. Los protagonistas son los héroes olvidados de un tiempo que parece remoto y que en realidad fue hace cuatro días. “Quisimos mal al mundo de la mina, y lo enterramos mal”, resume el escritor.
La muerte de 42 mineros, tras la explosión en el pozo Saint-Amé de la localidad de Liévin fue la mayor catástrofe minera de la posguerra en Francia, pero Chalandon se niega a hacer ficción con los muertos reales, y por eso inventa un minero número 43. Se llama Jojo y es el hermano de Michel, el narrador. El único medio de estar lo más cerca posible de las víctimas, nos dice el autor, es inventar personajes que no estropeen la realidad. Al final del libro figura la lista de los 42 muertos, oficiando de memorial.