En esta exhibición, Myriam Zini configura con su pintura e instalación los planos que se conectan desde territorios políticos en movimiento. Con su ser migrante presente, entrega una nueva forma de leer las zonas de contacto para la supervivencia crítica de la condición humana.
Estridencias en su pintura que se movilizan como un péndulo que anuncia algo que puede ser humanamente posible para la vida. Una “ecomemoria” que sustente un vuelo posible, hasta llegar a un nido de 400 kilos. Una gran malla metálica que presenta la pintura que dió origen a la serie, genera una zona de tensión con la instalación. A su vez es una gran frontera, una pares que, aunque transparente, resulta imposible traspasar. La instalación sonora se completa con el crotorreo de las cigueñas, ese sonido que produce su pico como señal de alegría casi imposible de reconocer. Desde allí trabaja la artista, atraviesa ese aibismo de la negación para levantarse sobre sí, allí en donde debe desobedecerse todo.
( Extracto del texto curaturial de Jacqueline Lacasa )
La muestra estará abierta al público de lunes a jueves de 10 a 20 horas y los viernes de 10 a 13 y de 14 a 18 horas. Alianza Francesa de Montevideo, Br. Artigas 1271
Registro fotográfico: Mario Cattivelli
