La ley del Embudo
Por Patricia Ianniruberto , Netmedia
En la 57a Bienal de Venecia convocada para el año 2017, Uruguay estará representado por un único artista, Mario Sagradini (1946 Uruguay), cuya trayectoria en el campo del arte contemporáneo es de peculiar relevancia.
Después de su exilio político en Italia (1978-1985) donde trabajó como grabador, al regresar a su país natal se constituyó en un atractivo referente de las promociones de artistas jóvenes, por cultivar hasta hoy una singular manera de entender y de ejercer las facultades del arte como deriva en el mundo de las palabras y las cosas; como rescate de objetos, relatos y experiencias; como exploración en los intersticios de la vida cotidiana. Al trabajar a menudo con el hallazgo etnográfico, lo hace también, interesadamente, con fragmentos significativos de la historia, de modo que a través de las prácticas de arte hace resurgir alternativamente (o simultáneamente) al artista historiador y al artista antropólogo.
La pieza que presenta en la 57ª Bienal de Venecia consiste en la forma de un corral para ganado bovino denominado “Embudo” usado en Uruguay desde el siglo XIX, al que el artista ha reconstruido a partir de una antigua fotografía.
El rótulo La ley del embudo con el que denominó a la instalación, es un término popular alusivo a la inequidad del sistema legal (lo ancho para pocos, lo estrecho para muchos) que se corresponde con la forma carcelaria del artefacto, cuyos dos bretes de entrada y de salida están coronados por portales a modo de guillotinas, todo lo cual sugiere una mistérica función ritual o sacrificial. Parte de una historia que abarca más de cien años del trabajo rural en el Río de la Plata se sintetiza en esta máquina política destinada a seleccionar y decidir el destino final de los cuerpos, por lo que puede leerse también como una metáfora sobre el poder y la animalidad de la condición humana. (texto Gabriel Peluffo Linari)
Mario Sagradini. Nació en Montevideo en 1946. Artista, investigador y gestor cultural, estudió en la Escuela Nacional de Bellas Artes y en la Facultad de Arquitectura en la Universidad de la República. Estudió grabado en el Studio Camnitzer-Porter y con Swyetlan Kraczyna en Italia. Se desempeñó como docente en la Escuela Nacional de Bellas Artes, en el Studio Camnitzer y en los museos de Treinta y Tres y San José, en Uruguay. Fue curador en varias muestras, entre las que se destacan las de los artistas Uricchio, Spósito, Faedo y Ombú. Fue Curador Intermitente Plenipotenciario en Unión Latina en 2003, destacándose entre otras la realización de las muestras de Goldwasser, Cabrera y Cristiani. Expuso en tres bienales de grabado: Bradford, Cali y Lubljana; y en seis bienales de arte: I y V del Mercosur, II y V de La Habana, Cuenca y Pontevedra. Obtuvo en 1999 la Beca Guggenheim y la beca de investigación de la Universidad de Texas-Rockefeller. Fue Artista invitado en Bellagio, Italia en 2001. Es coautor el Memorial de los Detenidos Desaparecidos (emplazado en el Cerro de Montevideo) junto a Ruben Otero y Martha Cohen, Rafael Dodera, Pablo Frontini y Diego López de Haro. También obtuvo entre otros, el Primer Premio en el Salón Nacional y en el Municipal. En 2006 recibió el Premio Figari a la Trayectoria. Fue director de Artes Plásticas del Ministerio de Educación y Cultura, y Director del Museo Nacional de Artes Visuales. Valiéndose de planteamientos provenientes del Land Art, el Arte Povera y un sincrético uso de materiales, arma situaciones donde priman la ironía y el humor. Desmitificar, generar dudas sin abandonar un dejo de nostalgia, son componentes característicos de su obra. Su actitud claramente antiesteticista le permite integrar a sus proyectos los elementos más diversos, siempre que resulten simbólicamente válidos. Su capacidad para “vernaculizar” los planteamientos del arte internacional quedó patentado en una muestra como Made in Uruguay (1991-1992) donde propone una lectura no exenta de ironía sobre el tema de qué es “lo uruguayo” tuvo gran repercusión fuera de fronteras. Reciclador, coleccionista de objetos mínimos, descartados por ser efímeros, son atesorados por Sagradini. Los objetos que recicla y expone son signos de nuestra modernidad urbana.
Mario Sagradini. La ley del Embudo. Del 13 de mayo al 26 de noviembre de 2017. Pabellón Nacional de Uruguay. Curador. Gabriel Peluffo Linari. Comisario: Alejandro Denes Fernández. Ministerio de Educación y Cultura.
FOTOS DEL MONTAJE DEL PABELLÓN URUGUAYO EN LA BIENAL (Cortesía del MEC y del artista):