Perfectos desconocidos indecentes
Cuatro actores geniales que se sacan chispas arriba del escenario (quizás se escape algún que otro pequeño exceso que no empaña los trabajos) es, sin lugar a dudas, lo más destacado de la última puesta del internacional Gerardo Begérez, uno de los más activos directores de la cartelera nacional.
Se trata de una pieza obviamente comercial, apta para alguien que desea ver la prolijidad en escena, sin complicarse la cabeza con aspectos intelectuales, ya que el texto en sí es de una linealidad que resulta dolorosa por momentos, con una resolución más que previsible.
La obra visita –una vez más– el problema de las parejas dobles de amigos y las complicadas relaciones cruzadas que se establecen o se desea establecer, y de los conflictos que se generan en el proceso. No es un tema nuevo, pero es tan humano que tampoco puede agotarse. El problema es que Jordi Vallejo no toma un solo riesgo y transita los caminos sencillos y probados, cargando sobre la dirección y las actuaciones el peso de dotar ritmo y brillo a la puesta de una obra con estas características. Y este elenco vaya si brilla.
De alguna manera, la anécdota propuesta toma elementos de Perfectos desconocidos (Álex de la Iglesia, 2017) y Una propuesta indecente (Adrian Lyne, 1993) y los combina con una conocida prueba psicológica que se realizó en Stanford a fines de los sesenta y que se llamó “El test del malvavisco”, porque se usaban golosinas para evaluar las actitudes de algunos niños con respecto a ser capaces de diferir una gratificación momentánea en aras de recibir una mayor.
En ese contexto, Begérez despliega su talento, gran escenografía, impecable (aunque marginal) uso de las luces y de la ambientación sonora (que suele ser lineal: canciones conocidas de los ochenta que los personajes bailan y cantan) y un vestuario bien realizado, sin duda. Una característica que jamás queda descuidada en las obras de este puestista es la de los rubros técnicos.
En suma, un rato agradable sin grandes complicaciones y con –insistimos– el destaque de un enorme conjunto de los mejores actores que tenemos.
Dramaturgia: Jordi Vallejo.
Versión y dirección: Gerardo Begérez.
Elenco: Humberto de Vargas, Gabriela Iribarren, Coco Rivero y Graciela Rodríguez.
Versión y dirección: Gerardo Begérez.
Vestuario: Nelson Mancebo.
Escenografía: Gerardo Bugarín.
Ambientación musical: José Martínez.
Luces: Leonardo Hualde.
Teatro del Notariado.
