Por Gabriela Gómez.
Y sigue tan campante.
La publicación del libro de Gabriel Sosa, Alejandro Michelena y Andrés Linardi da cuenta de la tradición de Montevideo como una ciudad de libreros, librerías y editoriales desde sus años más tempranos. Según este trabajo, la primera publicación data de la antigua Banda Oriental en el periódico inglés The Southern Star (La Estrella del Sur, mayo-julio de 1807), que debe ser considerada según Luis Beltrán el punto de inicio de las publicaciones impresas en nuestro país. La primera publicación literaria fue divulgada veinte años después, en 1835: el Parnaso Oriental o guirnalda poética de la república uruguaya, una colección de poesía en dos tomos.
Montevideo fue la ciudad que reunió desde sus inicios la mayor cantidad de librerías del país, desde los tiempos en que además eran el lugar de reunión y de convocatoria a tertulias literarias y donde además de libros se vendían otras cosas pasando a ser casi un local de “ramos generales”. En esos tiempos la figura del librero tenía una gran influencia a nivel del grupo social, muchos de ellos vinieron con sus negocios de Europa y, a falta de lugares de reunión, las librerías oficiaron de lugar de encuentro y de intercambio de ideas de avanzada de la época.
El primer librero que vivió de la venta de los libros, ya que tenía imprenta, por lo tanto confluían en él el trabajo de librero y editor, fue Jaime Hernández, quien había llegado a Montevideo en 1830. A partir de allí se fue desarrollando un mercado de libros que siempre fue muy importante, hasta la aparición de la Imprenta Barreiro y Ramos, la primera gran cadena de librerías que se instaló desde 1871 y ha sido desde entonces un gran referente de la cultura nacional. Dentro de muchos de los acontecimientos documentados en esta interesante publicación y que marcaron la historia de las librerías montevideanas, se destaca en 1944 la fundación de la librería Linardi y Quartino, que coincide con la aparición de una serie de escritores agrupados en la llamada Generación del 45 y que provocaría un gran movimiento editorial. Con un formato apaisado y con mucho material fotográfico, Historia de las librerías montevideanas reúne gran parte de la historia de los libros y la industria editorial de nuestro país, abarcando desde 1830 hasta 1990. La historia continúa, ya que el negocio de los libros ha seguido desarrollándose y adaptándose a los tiempos, con algunas interrupciones, pero en general no ha decaído y no se ha visto interrumpida ni en la crisis de 2002, siguiendo tan campante su curso a pesar de las adversidades.
Historia de las librerías montevideanas 1830-1990. Gabriel Sosa, Alejandro Michelena, Andrés Linardi. Editorial Planeta. 128 págs.