Por Gabriela Gómez.
Como nos tiene acostumbrados, el MAPI (Museo de Arte Precolombino e Indígena) presenta una nueva e interesantísima exposición, esta vez de la artista aruma (con minúscula) y su trabajo Illariykuna. Fibras de un sol rectangular, tejidos resplandecientes, que es todo un placer para los sentidos.
Tras el nombre artístico de la creadora se encuentra Sandra de Berduccy (1976), artista e investigadora boliviana residente en Chile que explora los cruces entre el arte, la ciencia y la tecnología. Apoyada en la teoría que afirma que la energía circula y se puede experimentar a través de los textiles andinos, propone nuevas formas de interactuar con ellos desarrollando otras formas sensoriales. En el museo se encuentran más de veinte obras, en tres salas acondicionadas especialmente, donde el espectador se siente en total comunión con las producciones de la artista y además se puede valer de una audioguía que sirve para ubicar las obras, informarse acerca de su origen y significado, y desarrollar así una comunión más estrecha con las obras.
Aruma lleva más de veinte años explorando los cruces entre arte ciencia y tecnología, dedicando su trabajo a la investigación del textil andino desde el enfoque de las artes mediales. Es licenciada en Artes Plásticas por la Universidad Mayor de San Andrés y realizó la Maestría en Artes Visuales en la Universidad Federal de Bahía-Brasil. Actualmente cursa el Doctorado Interdisciplinario en Humanidades en la Universidad Finis Terrae, en Chile.
En total, están expuestas cuarenta obras textiles donde encontramos las obras de la artista boliviana, con tejidos interactivos que incorporan la tradición andina, en diálogo con el arte digital y sonoro a la que se suman una serie de valiosos textiles arqueológicos propiedad de la colección del MAPI.
Las obras de aruma son obras interactivas e inmersivas, por lo que el espectador se integra a las estructuras creadas por la artista como en el caso de la obra ‘Sol rectangular’, que utiliza la luz y el sonido (acompañada por la música creada por el uruguayo Brian Mackern), a través de hilos conductivos, fibra óptica, cobre, sensores de oscuridad y microprocesadores.
Utilizando un lenguaje contemporáneo y vanguardista que tiene que ver con las últimas tecnologías, la artista ha ensayado hipótesis respecto a los posibles significados del telar, buscando en ellos la comprensión de los ciclos solares, las proporciones del paisaje, la geometría del universo. Su trabajo establece un vínculo entre las antiguas técnicas de tejido y el mundo tecnológico actual, haciendo uso de su sensibilidad e imaginación para explorar nuevas formas de tejer con diferentes materiales.
Esta exposición, bajo la curaduría de Valentina Montero, se realizó con la colaboración del Museo Nacional de Bellas Artes de Chile y el apoyo del Estado Plurinacional de Bolivia y la República de Chile y cumple con los objetivos fundamentales del museo. Según Facundo de Almeida, su director, se trata de “hacer visible la producción cultural de los primeros habitantes de América, desde los tiempos más remotos hasta la actualidad y mostrar el conocimiento que estas creaciones exigen”.
Aruma, Illariykuna. Fibras de un sol rectangular, tejidos resplandecientes. MAPI. 25 de Mayo 279. Lunes a sábado de 10.30 a 18 horas.