Montevideo fue sede de un enriquecedor intercambio sobre el futuro de las políticas culturales en Uruguay, con miras a las elecciones nacionales de 2024. El encuentro, titulado “Elecciones Nacionales 2024 / Políticas Públicas de Cultura 2025-2030”, fue coorganizado por UNESCO y la OEI, con el apoyo de Revista Dossier. Reunió a referentes técnicos de la Coalición Republicana y el Frente Amplio para debatir propuestas concretas que posicionen a la cultura como motor de desarrollo social y económico.
En la apertura, Ernesto Fernández Polcuch, director de UNESCO, destacó que la cultura es clave para construir un futuro sostenible, inclusivo y conectado con nuestras comunidades. El evento también contó con la moderación de la profesora Rosario Radakovich, de la Universidad de la República.
Propuestas y reflexiones
Representantes de ambas fuerzas políticas coincidieron en la necesidad de priorizar la cultura como derecho humano y herramienta de inclusión social. Se discutieron enfoques para descentralizar la oferta cultural, fortalecer las industrias creativas, promover el acceso a la educación artística y garantizar condiciones laborales dignas para los trabajadores del sector.
La Coalición Republicana enfatizó en un plan nacional de cultura que integre las expresiones culturales de todo el país, subrayando la importancia de valorar el patrimonio inmaterial y diversificar las fuentes de financiamiento mediante incentivos al mecenazgo. El Frente Amplio, por su parte, presentó un enfoque basado en el concepto de “culturas, artes y patrimonios”, con propuestas para fortalecer el sistema educativo artístico y descentralizar la infraestructura cultural hacia localidades menos favorecidas.
Un debate necesario y oportuno
El intercambio permitió a ambas fuerzas delinear sus visiones para el próximo período de gobierno, generando coincidencias sobre la transversalidad de la cultura en todas las áreas de desarrollo humano. Los organizadores subrayaron que es crucial que estas reflexiones se traduzcan en compromisos concretos dentro de las agendas políticas.
Con el respaldo de instituciones internacionales y una activa participación ciudadana, el evento reafirmó el rol de la cultura como pilar fundamental para el progreso de Uruguay.