Por Carlos Dopico.
Este año se celebra medio siglo del debut discográfico de una de las bandas insignes del rock británico, Queen. Bajo un título homónimo, Freddie Mercury, Brian May, Roger Taylor y John Deacon compilaron las canciones que tocaban desde su fundación misma, casi tres años antes, e incluso alguna que antecedía a la propia banda. Vale recordar que los tres primeros junto con Tim Staffell habían probado su suerte con una banda llamada Smile. El disco, con clara impronta de rock progresivo y heavy metal, tenía como referencia grupos antecesores como Led Zeppelin, Black Sabbath y Jethro Tull, mientras que las guitarras remitían a Jeff Beck, Cream o al propio Jimi Hendrix.
Mercury fue el más prolífico en las composiciones, pero tanto May como Taylor sumaron su aporte para alcanzar la decena de surcos. Queen se publicó en 1973, cuando en nuestro país se disolvían las cámaras parlamentarias para dar lugar a doce años de dictadura. Aquel año se publicaban otras obras fundamentales como Countdown to Ecstasy, de Steely Dan; Living in the Material World, de George Harrison; The Dark Side of the Moon, de Pink Floyd; Houses of the Holy, de Led Zeppelin, y Aladdin Sane, de David Bowie. La mayor parte de las composiciones tenían aires barrocos y gran cantidad de arreglos instrumentales, tantos que es casi lo que cada uno de los miembros desearía haber simplificado años más tarde. ‘Keep yourself alive’ y ‘Liar’, fueron los simples editados antes que el propio álbum y si bien no lograron colarse en ninguno de los ranking de entonces sí fueron bien recibidas por la crítica