Weinberger, el francotirador
Eliot Weinberger (1949, Nueva York) es una de las mentes más brillantes y agudas en el actual panorama intelectual mundial. En Las cataratas (Editorial Duomo), el escritor nos conduce por senderos que traspasan los confines de la crítica habitual y apunta, como un francotirador, sobre lo político y, sobre todo, los políticos.
Son once capítulos que se pueden leer como breves e intensos ensayos de uno de los grandes pensadores contemporáneos. Weinberger no concede un ápice a filósofos consagrados, ni al status quo, ni a las potencias y, mucho menos, a las ideologías o las religiones.
“No hay tigre en la Biblia y tampoco los había en la Europa medieval; los bestiarios tendían a clasificarlos como pájaros o serpientes. Durante casi un milenio no hubo tigres que lo parecieran en el arte occidental. Así que cuando empezaron a ser importados de nuevo a Europa desde el mercado animal de Constantinopla a fines del siglo XV, eran las únicas criaturas que carecían de significado metafísico. Ante la falta de una iconografía establecida, Occidente tuvo que inventar su tigre alegórico”, afirma en “Tigres de papel”.
Este párrafo, apenas una muestra de La cataratas, denuncia como el sistema, en este caso las religiones, deben crear, echando mano al método Origami, a monstruos de papel.