A la vuelta de la esquina
La violencia del narcotráfico ha sido (y es) uno de los temas más recurrentes en la literatura colombiana, comenzando por la Virgen de los sicarios, de Fernando Vallejo, Rosario Tijeras, de Jorge Franco, y El olvido que seremos, de Héctor Joaquín Abad Faciolince, por citar tres novelas de proyección internacional y ganadoras de varios premios. La situación que padeció ese país en la década de 1980 y comienzos de la de 1990 parece ser aún materia prima de escritores para ajustar y zanjar cuentas con el pasado reciente.
La cuadra, la primera novela de Gilmer Mesa (Medellín, 1978), es otro ejemplo de cómo se puede transformar el dolor en buena literatura. La novela comienza cuando el narrador mira una fotografía de su infancia. En la imagen aparece un grupo de niños, sonrientes, mirando al futuro, desconociendo –cómo podrían saberlo– que iba a ser tan negro como la muerte. Porque ese grupo de amigos de la infancia del narrador, en el presente, están muertos. Asesinados, para ser más exactos. Y es a partir de esa fotografía, que estructura a la novela en los nueve capítulos que la integran, que el lector se va adentrando en un universo de violencia, en el que descubre que aquellos niños, amigos y familiares del narrador se transformaron en violadores y sicarios, en “testigos, víctimas y realizadores de la violencia”.
Esa violencia de la década de 1980 encuentra uno de sus puntos más altos, y estremecedores, en una frase pronunciada por Claudia, uno de los personajes. “Nos vemos en el infierno, mi querido malparido”, dice la mujer ante el cuerpo inerte de Denis, un sicario que fue su novio. La escena es impresionante si tenemos en cuenta el contexto de la historia. Denis acaba de ser asesinado por el hijo de Claudia, fruto de una violación colectiva orquestada por su novio. La madre por fin ha sido vengada.
La cuadra es una novela corta e intensa, desplegada en un espacio físico acotado, esa cuadra o manzana donde vivía Gilmer Mesa en su infancia y adolescencia. Pero lo delimitado del espacio, lo micro, se transforma en la radiografía de una sociedad convulsionada en una ciudad llamada Medellín y un país llamado Colombia.
La cuadra, de Gilmer Mesa. Editorial Penguin Random House, 2017, 192 págs. Distribuye Random House.