Por Carlos Dopico.

A los 84 años, y más de medio siglo después de su fallido debut en solitario, Ringo Starr, el más country de The Beatles, sorprendió a mediados de enero con un nuevo trabajo discográfico. Se trata de Look Up, un álbum completo de once canciones que interrumpe su predilección contemporánea de editar breves EP.
13 años después de su Ringo 2012, el legendario baterista del cuarteto de Liverpool volvió a pararse frente al micrófono y también detrás de los parches de su histórico instrumento para insistir con su mensaje pacifista y conciliador, esta vez en modo folk.
La génesis del proyecto surgió hace un par de años, cuando en un evento musical se cruzó con el célebre compositor y productor T-Bone Burnett. En aquel momento, al pasar, Ringo le pidió que le escribiera una canción. Al poco tiempo, el músico con reconocida experiencia junto a Robert Plant, Elton John y el mismísimo Bob Dylan, le había enviado una docena.
Su vínculo con el country está no solo presente en su trabajo solista Beaucoups of Blues (1970), sino que ya anteriormente lo estaba en el propio cancionero beatle, desde “Act Naturally”, publicado en la versión británica de Help!, a su debut como compositor con “Don’t Pass Me By” (The Beatles, 1968).
Con Burnett al frente de la producción, Starr grabó una parte en estudios de Nashville y otro tanto en salas de Los Ángeles con cesionistas expertos en la materia. Es por eso por lo que Look Up está envuelto en esa atmósfera sonora propia del country, con sonido de cuerdas metálicas, efecto slide o bucólicas postales folk. Además de su voz, destacan algunas cantantes que le acompañan: Alison Krauss, en “Thankul”; las hermanas Rebecca y Megan Lovell en “String theory” y, por sobretodo, Molly Tuttle, en “I Live For You Love” y “Can You Hear Me Call.